TINDER WORLD
Tinder es todo un mundo. Una realidad virtual para que personas se conozcan e interactúen. Esto es de conocimiento público.
Depende de lo que busques. Muchas mujeres compartir un café, una conversación o relación de pareja, algunas un buen polvo. La mayoría de los hombres buscan sexo puro y duro, indican mis lectoras. "Muchos envían fotos de sus penes a los cinco minutos de charla jactándose de su tamaño. Ni un brillo" , cuenta una de ellas. Esto lo extraigo de las experiencias que me contaron amigas y las soas en mi Instagram (no fueron pocas).
En una sociedad donde se vive a través de redes sociales y la inmediatez, este espacio se hizo muy cómodo para personas que buscan algún tipo de compañía, "sin moverse de su escritorio". Debo confesar que tengo muchas aprensiones y prejuicios con esta APP. Soy conservadora en estos menesteres y "sapiosexual" (me atraen sexualmente los hombres inteligentes. Hay caleta oyeee).
En base a mi escueta experiencia en estas lides, hace ocho años una amiga me abrió Tinder para que me "entretenga". En ese entonces había terminado una relación recientemente. Además, estaba en cama operada de una rodilla, tenía tiempo de sobra. Muchas mujeres abren Tinder cuando se separan.
Para mi sorpresa encontré en esta realidad virtual bastantes conocidos, algunos con pareja. Estaba el vecino, el panadero, el amigo parquímetro, entre otros personajes del día a día. Me horroricé.
Esta ciudad es chica, ninguno me pareció atractivo. Tipos posando en la taza del water, arriba de un tractor, mostrando su auto, con poses sexys, fotos de paisajes (que chucha es esa wea). Weones que tienen requisitos, los perlas. Un tipo requería mujeres talla S y M. Los únicos minos eran los argentinos de Bariloche.
Sin embargo, conocí a alguien súper buena onda. De Tinder pasamos al Whatsapp y cerré la wea (no quería seguir en el mercado). Conversamos mucho, de lo humano y lo divino. Hasta que un día nos mató la curiosidad. Fui al encuentro con muletas (cachen la weona ansiosa). Salimos a comer y al cine. Esa "relación" duró tres meses hasta que viajé a Nueva York. Cuando regresé nunca más contestó mis mensajes. Ya salía con otra, pichula. Raya para la suma fue una buena experiencia.
Nunca más lo abrí porque no me interesa. La lengua es más "larga que la panamericana" acá en el sur. No estoy dispuesta al conventilleo. En esto el machismo recalcitrante hace que se juzgue a las mujeres por estar ahí. No me debería importar, pero sí.
La segunda experiencia la tuve en Praga, nuevamente por la presión de unas amigas. Accedí porque Tinder en Europa es otra cosa mariposa. Duré dos horas en la aplicación y me bloquearon para siempre. Hice todos los pasos de autentificación mal. Definitivamente mi destino no es tener esa wea. Soy de la vieja escuela, de tradiciones.
Entrando en materia, de acuerdo a los resultados obtenidos en mi consulta la mayoría de las mujeres relataron que han conocidos "puros weones que sólo piensan con el pico" (lo dicen ellas, no yo). También hay casos que terminaron en matrimonio o en algún pololeo importante. Esto es una ruleta, cómo ganarse la lotería. Son los menos.
Por otro lado, hay mujeres que quieren vivir en libertad su sexualidad. En este caso la plataforma se hace súper eficiente. El problema, desde mi punto de vista, es la seguridad.
Una amiga me escribió que se juntaría con un tipo en la casa de éste. Me dijo "te enviaré mi ubicación". Me dio pavor ¿Cuánto podemos arriesgar? Es la pregunta que resuena en mi cabeza. Afortunadamente no le pasó nada. Otro tipo la invitó hacer un trío. También me comentó que es ella la que provee los condones. Esto último me supera. Ni los condones compran. Ya saen ya soas.
En vista y considerando las experiencias de las mujeres que me escribieron presentaré algunos testimonios. Les pueden sangrar los ojos.
Soa 1 : "Puros pasteles. Tipos ansiosos que webean si no les responder altiro. Tipos sin lucas para juntarse. Fomes e incultos. Sólo quieren tener sexo y no son buenos ni para eso. Mi experiencia ha sido pésima. Sólo uno ha salvado. Es bueno pero muy cuadrado y de derecha. Eso me mató la pasión, así que cagó".
Soa 2: "Suele ser muy entretenido al principio pero luego choca. No sé cómo explicarlo pero no se siente real".
Soa 3: "Nefasto Tinder en el sur. No tengo nada contra la gente de campo pero pareciera que todos son medios "acampaos". Cacha los modelitos (me envía fotos). No dan ni para servirse una cosita poca".
Soa 4: "Yo terminé cansándome con mi amiguito Tinder. Fue mi primer "match" cuando mi hermana chica me instaló la aplicación en el 2015. Ahora somos una familia en expansión".
Soa 5: "Tinder sólo sirve para pegarse unas cachas. Todos con el mismo discurso "estoy conociendo gente (tulas sociables)y disfrutando mi sexualidad". O sea weones que la meten a lo que se les cruza y después chao. Pésima mi experiencia, sólo me trajo ansiedad y sentirme cómo un pedazo de carne"
Soa 6: "Conocí a un mino hace cinco años. Lo pasamos súper bien y después de un año intimamos. Él volvió con su ex y seguimos siendo amigos. Cuando se separó pasó de todo y hasta el día de hoy somos amigos con algunas recaídas pero sin rollos. Me hice muy amiga de su círculo y nos juntamos siempre".
Soa 7: "Callampa. Bumble tiene mejor filtro y las minas tenemos que hablar primero. Así que nos permite encaminar mejor la conversación. Mi peor experiencia fue que, a una semana de la única cita, un tipo me quería presentar a su familia. Se sinceró, tenía 37 y seguía viviendo con su mamá y que no tenía trabajo. Su proyecto era desarrollar una plataforma pagada que reivindicara el barrio .. Yo por mi parte asumiendo una gerencia. Me corrí de mantener a ese bolas tristes mitómano".
Soa 8: "Luego que me separé del padre de mis hijos, la instalé. Llegué a tener dos citas en el mismo día. Tenía que aprovechar el finde que mis hijos se quedaban con el padre. No había tiempo que perder. Me comí lo que quise, lo pasé increíble. Lo único malo era tener que relatar siempre el mismo discurso para conocerse. Memorizar lo que otro me contaba para no confundirme. Conocí de todo en realidad, todo lo que no conocí cuando estaba casada. Para finalizar hace más de dos años conocí al último, al que me robó el corazón. Él de 33, yo de 39".
Soa 9: "La mejor experiencia mi marido".
Ante lo expuesto, esta APP da para estudios sociológicos y sicológicos importantes. No encontré ninguno interesante.
Desde mi punto de vista Tinder es un arma de doble filo. Aquí se entrama un complejo escenario ligado a la aprobación y al rechazo. Las mujeres inseguras que ocupan la APP, con baja autoestima, se refugian en este espacio para sentirse deseadas. Los "match" son inyecciones de autosatisfacción. El problema es cuando esto decanta en la realidad. Si el uso de esta APP provoca daño emocional y sicológico, este no es el lugar.
Por otra parte hay que comprender que esto es un juego, cómo el Tetris (de soa). Hay que saber mover las piezas para que la cosa cuaje sino produce frustración. Tomarlo cómo un lugar para entretenerse, pasarlo bien. Cómo buena jugadora tienes que saber ganar o perder. Quizá, en una remota galaxia de Internet, puedas encontrar al "amor de tu vida". Ahora si sólo buscas sexo salvaje con escándalo y rotura de clavícula incluida, dale con todo.
Por mi parte paso, no muchas gracias. Para todo lo demás existe el Satisfyer ...
Fin
Comentarios
Publicar un comentario